Cada miércoles un cuento en El Estafador

lunes, 31 de mayo de 2010

Campeón

El 30 de Abril escribí un post en el que me comprometía a vencer mi pereza (altamente justificada pero pereza al fin y al cabo) para ir al montón de conciertos interesantes que habría en Murcia durante el mes de Mayo. Pues bien, termina Mayo y debo decir que, con la inestimable colaboración de madre y hermanas, lo he conseguido. Estoy hecho un campeón.


Repasemos mis logros.


Lo del SOS ya lo conté, así que no insisto.

Triángulo de amor bizarro. Iba a ir solo pero una carambola con mi hermana pequeña me dejó ir con Mercedes. Iba algo escéptica pero al final salió convencida de que el grupo español con nombre más molón tienen un directo total (tomaron el nombre de una canción de New Order  pero a mí me recuerda a Krazy Kat).




Hace algunos días, una lectora, Alba, se sorprendía de que le gustara música de hace tiempo. Pues yo flipo con músicos muuucho más jóvenes que yo, como estos.

Nunca había visto tanto pedal de distorsión junto, por cierto.





Fernando Alfaro. A este concierto no fui pero porque se suspendió.

Alfaro es de Albacete y allí la teoría de los seis pasos de relación entre personas se reduce a tres pasos y de conocimiento. Así que conozco a una persona que conoce a una persona que conoce a Alfaro. Las cosas andan regular y como soy de esos fan que mezclan admiración con emotividad, estoy regular. Me concolaré pensando que dentro de poco sacará nuevo disco.

Klaus & Kinsky y Los Punsetes. Aquí no hubo apaño y fui solo. Como ya llevo varios conciertos en soledad he perdido la paranoia de veces anteriores y no pensaba que todo el mundo me miraba y me señalaban con el dedo diciendo: Mira, ese va solo.

Fui con los deberes hechos y me sabía las letras de casi todas las canciones.

Como en el concierto de Nixon de hace unos meses, me sorprendió ver a un montón de muchachas con grandes cámaras venga a tomar fotos. Con una de las fotógrafas estuve a punto de enfadarme porque una cosa es que tu cámara tenga más megapíxeles que ninguna y otra bien distinta es que te pases todo el concierto pasando por delante y molestando.

Los Punsetes son un grupo raro. No cruzaron ni una sola palabra entre ellos y al público solo nos dijeron al final: Muchas gracias, adiós. Tampoco hicieron bises.

Los bises es una cosa venida a menos. Ya forma parte del set list de los conciertos y se hacen sin que el público insista mucho. Marina, de Klaus&Kinski lo explicó muy bien cuando volvió al escenario tres segundos después de dejarlo y dijo: Después de esta pausa absurda impuesta por la costumbre... Voto por volver al viejo estilo: bises de verdad (canciones ya tocadas en el concierto) y siempre y cuando el público grite mucho.

Eli Paperboy Reed. Conciertazo. Ocho músicos dándolo todo. Solo faltaron las coristas que no hubieran cabido en el escenario.

Siempre digo que no voy a volver a un concierto con Mercedes porque se dedica todo el tiempo a quitarle glamour a los músicos. Los de Eli, The True Loves, eran todos del medio oeste o del sur profundo y cuando los fueron presentando ella iba diciendo: From Las Pedroñeras, Cuenca, Menganito... From Casas Ibáñez, Albacete, Fulanito...

Hubo un telonero que yo no conocía yque mi amigo Miguel (aquí su crónica del concierto) me situó. Fernando Rubio, un clásico del rock murciano. Pongo una de sus canciones porque me da que será del gusto de Joserra:



PD. Ya he marcado en rojo el 17 de septiembre de este año. ¡Eels toca en Barcelona y ya tenemos las entradas!

PDII: ¿Los diseñadores de ropa femenina piensan en las pobres personas que luego tenemos que padecer planchando esas prendas imposibles?

sábado, 29 de mayo de 2010

Hopper

No es que me conozca bien toda la filmografía de Dennis Hopper pero de la que he visto, mi escena favorita es la que sigue:




Eso es morir con dignidad, sin decirle al malo dónde está tu hijo y tocándole tanto las pelotas que ni se molesta en torturarte.

jueves, 27 de mayo de 2010

Pippi en el quirófano

La gente suele echarse (un poco) las manos a la cabeza cuando se entera de que tanto Mercedes como yo somos licenciados en Veterinaria pero no ejercemos. Pero si esa carrera es dificilísima, nos dicen. Y tienen toda la razón. Habéis echado a perder seis años de vuestra vida. Y no tienen razón.

Se me ocurren varios argumentos para defender lo último pero contaré uno definitivo.

Darío tiene una muñeca pelirroja con coletas. No tenía más remedio que ser Pippi. El lunes ocurrió un terrible accidente y la muñeca perdió una pierna. Así quedó:



Gracias a años de duros estudios y un par de años de trabajo, pudimos afrontar la emergencia. Dispusimos una parte del estudio para intervenir, sacamos a Darío al patio (es bien sabido que los dueños de las muñecas se ponen muy nervisosos cuando ellas están en el quirófano y pueden molestar al cirujano), preparamos una buena anestesia inhalatoria y unimos la pierna al cuerpo usando una sutura invertida continua de Lembert, que es mi favorita, más que nada por el nombre.

Quedó como nueva:



Han pasado un par de días y Pippi ya corre.

miércoles, 26 de mayo de 2010

Asamblea


En mi opinión, el consenso es la forma más democrática de toma de decisiones que existe. No es fácil, en todo caso. Hace falta que todos se esfuercen en participar, que cada cual exponga lo mejor posible su opinión y que, finalmente, se sepa respetar lo que se decide.

Como no es un método matemático, no es del todo exacto. Tengo un amigo (o tenía porque hace años que no sé de él) que daba sus argumentos una y otra vez, una y otra vez, hasta que, con tal de que se callara, acabábamos dándole la opinión. Era un pesado pero argumentaba con brillantez.

Como me pasaba mucho tiempo con él, me fui haciendo de los pesados en las asambleas. Aunque también me esfuerzo en razonar. Odio el "porque sí".

Pero, ay, he dado con la horma de mi zapato.

Hay un asunto que nos lleva de cabeza desde hace varias semanas en casa. Como somos democráticos y asamablearios a más no poder, la otra noche convocamos una asamblea. A Darío le encantan porque puede ir dando saltos de uno a otro como si fuera un mono. El resto nos empleamos a fondo en resolver la cuestión. Supongo que los habituales de esto ya sabréis lo que pasó: Juan se llevó el gato al agua. Ya no es que sea el que tiene más tesón de los tres, Darío seguía a lo suyo, esta vez fingiendo que era un cachorrito, es que va probando con todo tipo de argumentos, desde los aplastantemente lógicos a los desconcertantemente dadaístas, hasta que no tienes más remedio que darle la razón. Si en casa las decisiones se tomaran a garrotazos, aún tendría algo que hacer. Bueno, no sé, que Mercedes y Juan se dan mucha maña en el manejo del garrote. Por no hablar de Darío.

PD: Los expertos, gente que dice saber, afirman que a los hijos hay que llegar ya con una respuesta firme. El padre y la madre no deben dudar en su presencia ni deben mostrar opiniones encontradas. Yo no pienso así. Los hijos pueden aprender mucho si ven que cada cual piensa una cosa, se puede hablar de ello y se puede llegar a un punto de encuentro sobre el que tomar decisiones.

martes, 25 de mayo de 2010

Así es Murcia

Llamadas telefónicas (y II)





Mercedes aguantó su anterior móvil hasta que el pobre ya no dio más de sí. De hecho, fue el mismo teléfono en persona el que le pidió clemencia. Las teclas le dolían, la batería apenas le aguantaba unas horas, la pantalla se veía a trozos. Abandóname, le dijo, y sálvate tú. Era un teléfono algo teatrero, todo sea dicho.

Como a los niños, y a los mayores, les encantan estos cachibaches, Mercedes jubiló al aparato como teléfono y le dio una nueva vida como juguete de Darío. Darío, claro está, juega a que es un teléfono.

Al principio era muy discreto y le daba el número solo a unos pocos. Familiares cercanos y Pippi. Ella es la que más llama. Papá, dice Darío de vez en cuando acercándome el teléfono, es Pippi. Cuando me doy cuenta llevo un rato teniendo una conversación de lo más natural con una interlocutora imaginaria. A veces, sujeto el teléfono con el hombro y sigo conversando mientras cocino.

Darío está aumentando su círculo de amistades y cada vez llama más gente al teléfono. Hablar con Pippi es divertido pero con otros, uf, es un coñazo. Por ejemplo, con Mowgli. No es que llame mucho pero cada vez que lo hace nos pone la cabeza loca contándonos todos sus achaques. La cuadrilla está envejeciendo mal y cuando no nos relata con todo tipo de pormenores los resultados de su último análisis de orina, nos cuenta la visita al reumatólogo de Bagueera o la cantidad de pastillas que tiene que tomar Baloo al cabo del día. Al final, acabamos poniendo alguna excusa y colgando. Creo que se ha dado cuenta porque la última vez estuvo un poco seco y cuando le preguntamos por su salud, apenas sí dijo dos o tres palabras.

Ya no están para estos trotes:

lunes, 24 de mayo de 2010

Interferencias artísticas (Bernadette Strikes Back)

Anteriormente. Escribí una entrada del bestiario dedicada a la cigarra y la hormiga. Hice caso a los comentarios y me compré una guitarra. Le puse nombre.


*  *  *

Anteriormente también pero algo después, es decir, menos anteriormente. Cuando a alguien le diagnostican una enfermedad, no debería consultarla en internet. Lo más probable es que se tope con cantidades ingentes de información, no siempre precisa. Y el exceso lleva al colapso. Y colapsado, o no se actúa o se actúa mal.

Salvando las distancias, fue lo que me ocurrió con la guitarra. En vez de ceñirme a un manual concreto, me metí en internet y pasé días saltando de blog en blog, de página de tablaturas en página de tabalaturas, de vídeo en vídeo, hasta que me bloqueé y dejé a Bernadette olvidada en su funda.

*  *  *

Ahora. Los libros de texto de Educación social (que aunque no lo parezca, es una diplomatura) son un churro. Se abusa del Ctrl+C Ctrl+V hasta el aburrimiento, se traslada lo escolar a la educación de calle como su fuera lo mismo y, lo que es peor, están escritos por profesores de universidad que hace años que no están con la gente sobre la que escriben. Cada vez que leo alguno, acabo cabreado como un mono porque una cosa es mantener un discurso guay y otra poder ponerlo en práctica. No tienen ni idea de lo que hay ahí afuera.

Se repite mucho eso de la relación horizontal entre el educador y el educando y que el primero también debe estar dispuesto a aprender del segundo. Y mira por dónde, a veces pasa.

Uno de los chavales de mi trabajo nuevo es todo un Guitar Hero. Todavía no toca muy bien la guitarra pero tiene toda la actitud y el convencimiento. En una sesión sobre pensamiento positivo, dijo que él quería ser profesional de la música. No quería volver a casa de su trabajo, encontrarse con su mujer y sus hijos y después meterse en una habitación insonorizada llena de instrumentos a ensayar un rato. No. Nada de eso. Él quiere ser un músico que viva de la música. Intenté bajarle un poco al suelo. Le dije que tampoco sería mala opción conformarse con ser feliz haciendo música mientras se gana un sueldo por otro lado. Eso no es un pensamiento positivo, me espetó. Y tenía razón.

El chaval habla sin cesar de su guitarra y de sus sueños. Y yo me he dicho, aprende de él, venga, vuelve a intentarlo, desenfunda a Bernadette.

Lo hice hace un par de semanas. Pero esta vez no cometeré el mismo error. Estoy siguiendo disciplinadamente un manual que me compré el verano anterior en Gijón (ah, Gijón). Paso por paso.

Pensaba que la guitarra me quitaría tiempo para escribir. Aunque más bien es como si todo le quitara tiempo a todo. Lo que ha pasado es que tengo dedos de señorito y de pisar las cuerdas tengo las yemas de los dedos de la mano izquierda casi en carne viva. Me duelen tanto que no puedo ni teclear. Este post lo he tenido que escribir solo con la mano derecha y he tardado un montón en hacerlo.

(Mercedes, que lo que dije el otro día de formar un grupo e irme por ahí de gira, era broma. Solo quiero aprender a tocar por gusto. Con llegar a hacer bien la cejilla me conformo.)

jueves, 20 de mayo de 2010

¡Ay, Filomena, Filomena! (lo que nos faltaba)


Una amiga, no contenta con haber dinamitado nuestras barreras mentales, ya bastante inestables, con la "Gramática de la fantasía" de Rodari, nos ha dejado un libro de Miquel Obiols que se titula "¡Ay, Filomena, Filomena!". En el primer cuento, Filomena dice:

El lenguaje que se han inventado los mayores me aburre y me fastidia. Ellos pusieron un nombre a todo y se quedaron muy tranquilos. Y ahora nos hacen aprender nombres y más nombres como si fuéramos papagayos: el libro es un libro, la silla es una silla, y ¡hala!, así todo lo demás. Ya estoy cansada de repetir siempre lo mismo y quiero inventar un nuevo lenguaje para que todo sea más divertido. Seguro que entonces no me aburriré.

Filomena, ni corta ni perezosa, decide llamar "mejilla" a la "habitación", "mariposa" a la "silla", "bañera" a la "caja" y así sin parar. A Juan le ha parecido buena idea.

Los ánimos en casa siguen todavía algo crispados por el bolso de Pippi. La custodia compartida propuesta por Ainoja ha sido aceptada por Darío y Mercedes, aunque a regañadientes. Ya se hablan pero siguen saltando chispas entre los dos.

Y en esas, Juan ha empezado a copiar a Filomena. Ahora nuestra casa es una pequeña Babel en la que cada vez es más dífícil entenderse.

Caminamos hacia el caos.

Libélula pop

Ayer, buscando en Google, me encontré por casualidad con un programa de La Libélula (Radio3), dedicado a los "Cuentos pop". Fue toda una sorpresa. Interpretan varios de los cuentos, algunos ligeramente adaptados, y está chulísimo. Si alguien quiere escucharlo, que pinche aquí.

Hace algunas semanas, salió una entrevista en AUX Magazine. Lo interesante es que también entrevistan a José María Casanovas, el ilustrador. La subo al blog del libro.

miércoles, 19 de mayo de 2010

Un buen día de trabajo


Sí, el título parece contradictorio. Pero hay días en que las cosas salen bien en el trabajo. Qué le vamos a hacer.

El proyecto en el que empecé hace algo más de un mes es nuevo. A los educadores sociales nos gusta decir "experimental". Experimental significa que hay que llamar por teléfono sin parar a unos y a otras, buscar locales debajo de las piedras, hacer malabarismos para cuadrar horarios, programar y desprogramar, etcétera. Pero parece que la cosa va cogiendo forma.

Ayer llegué un poco antes de la hora al primer grupo de chavales y me senté a esperarlos en un banco leyendo un libro. Cuando llegó la muchachada, uno de ellos me gritó: Profesor, ¿qué haces estudiando? Rápido, ¡tira ese libro! Efectivamente, desde varios puntos de vista los libros pueden ser peligrosos. Dejaré este asunto para un post futuro.

Después, a lo largo de la sesión, descubrí dos cosas pasmosas.

La primera es que, a pesar de las evidencias, Saddam Hussein no está muerto. No me supieron aclarar si forma parte del club de Elvis y Disney pero lo que parece estar claro es que lo de su muerte es una patraña.

Lo segundo creo que es el último rumor que faltaba por fabricar sobre Michael Jackson. Todo apunta a que había intentado convertirse en mujer y no lo consiguió. Todavía no me había recuperado de la sorpresa cuando tuve que agotar todos mis recursos para la resolución pacífica de conflictos porque uno de los chiquillos consideró que esto era una ofensa y nadie se mete con el Rey del pop delante suya.

martes, 18 de mayo de 2010

Cervatillos

El concierto de Klaus&Kinski y Los Punsetes parece que va a ser clandestino. Llevo varios días intentando averiguar dónde venden las entradas y nada. Hay una canción de los madrileños, "Los cervatillos", que me recuerda a una de mis páginas dominicales favoritas de mis personajes favoritos, Calvin&Hobbes:



Me parto cada vez que la leo.

PD: Como suele pasar, he encontrado la página que buscaba casi en el último tebeo que he mirado. Creo que lo he hecho a posta, o sea, sabía que estaba en uno de los primeros números de los editados por el Grupo Z, pero he empezado por los últimos para recrearme por enésima vez con el arte de Bill Watterson. De todos los temas recurrentes, el que más me gusta es el de los muñecos de nieve:



Voy a adoptar esta como lema del blog:



(Ya sabéis que si no se leen bien las imágenes, se puede pinchar sobre ellas y se agrandan.)

lunes, 17 de mayo de 2010

Cisma familiar

Todo podría haber ocurrido el martes pasado. En la clase de Juan están trabajando las profesiones. Cuando lo recogí, me preguntó qué era yo. Esa pregunta me desconcierta. Básicamente la odio porque nunca sé qué responder. Después me preguntó si su madre era ama de casa. Hay que fastidiarse. Cinco años dándole de comer, llevándole al pediatra, haciendo la compra y etcétera para que el nenico me pregunte si el ama de casa es su madre. Cría cuervos:



Podría haber sido el martes pero fue el domingo. En Murcia ponen un rastro todos los domingos que hemos redescubierto hace poco para regocijo de nuestra colección de vinilos y pesadumbre de nuestros ahorros. Ayer, con la excusa de cambiar un disco de Nacha Pop que no se escuchaba bien, volvimos a ir. Y nos compramos la siguiente maravilla:


El bolso es una pasada y es de ¡1975! El del puesto notó la emoción en mi voz cuando le pregunté el precio, y eso que intenté mostrarme lo más indiferente posible. Noté cómo pensaba en lo que podría pedirme por él. No fue mucho, diez euros.

El cisma ocurrió al llegar a casa. Darío dio por hecho que el bolso era para él pero Mercedes le dijo que no, que se lo quedaba ella para ser la más moderna del mundo mundial.

Llevan desde entonces sin hablarse y la armonía y paz familiar ha saltado por los aires. Me voy corriendo (virtualmente) a ebay a ver si doy con un bolso igual.

domingo, 16 de mayo de 2010

Moment(az)o Wii

Este fin de semana nos falló un poco el plan. Consulto habitualmente la agenda de conciertos de Murcia, habitualmente para ver lo que me pierdo, aunque este mes estoy dispuesto a ir a casi todo lo que me interese, y se me escapó el que dieron Los lagos de Hinault el sábado. El comodín de las titas lo gastamos el viernes para ir a ver pinchar a Ellos y cuando supimos que veían ya nos dio vergüenza pedir otro favor.

Los lagos de Hinault es de esos grupos que se descubren en los blogs y que molan bastante. Mercedes es muy fan. Esta es su canción favorita:



El viernes por la noche vino mi hermanica M. a quedarse con Caín y Abel. También vino S. con la Wii. Como Juan flipaba con alguno de los juegos, se la han dejado este fin de semana.

En la sobremesa del sábado, descubrimos que todo lo que se ha escrito de esa consola es verdad. Es ideal para sumar nuevos jugadores y para usarla en familia. Mientras Darío se echaba la siesta, Juan, Mercedes y un servidor probamos uno de esos juegos familiares. Mercedes empezó haciéndose la torpe con el mando de la Wii pero acabó de pie en el sofá coreando gritos de humillación hacia nosotros, los hombres. Juan y yo dijimos que había hecho trampa, apagamos la consola y dijimos que no nos apetecía jugar más.

PDI: En lo de Ellos, estuve hablando con una amiga que hacía mucho que no veía. Aparte de eso, me pasaron dos cosas muy emocionantes. Le había regalado "Cuentos pop" a una amiga sin saber que era mío y uno de sus amigos me reconoció. ¿Tú eres Fede, no? Qué gran momento. Mi ego de escritor se hinchó como un zeppelin. Y todavía no se ha desinflado.

PDII: Dice la RAE que "Cinismo" es Desvergüenza en el mentir o en la defensa y práctica de acciones o doctrinas vituperables y también Impudencia, obscenidad descarada. Por su parte, María Dolores de Cospedal, secretaria general del PP,dice que el Partido Popular es "el partido social y progresista" en España porque es el partido "de los trabajadores". (Aquí la fuente por si alguien no se cree que haya dicho tal cosa.)

jueves, 13 de mayo de 2010

Llamadas telefónicas (I)


Antecedentes: Hace algún tiempo, tuvimos problemas con una caja de los clicks. El velociraptor no aparecía. Mercedes escribió a la fábrica que hay en Alicante (o por ahí) y nos lo mandaron. Juan declaró a su madre heroína del año.

*  *  *

En el reparto de tareas del hogar, Mercedes es la encargada de revisar y archivar las facturas. Lo hace con una diligencia extraordinaria. En su revisión rutinaria de la factura del teléfono, encontró algo poco habitual: una llamada a Alemania. ¿A quién conoces tú en Alemania? me preguntó. A nadie, le dije. Pues alguien ha llamado a Alemania. Yo no he sido, dije con un tono sospechoso. Pero era verdad, yo no había sido.

No fue difícil averiguar lo que había pasado. Juan nos lo contó todo. No encontraba la corona de la última caja de los clicks que le habíamos comprado. Una con dos ladrones que roban la susodicha corona de una vitrina de museo. Así que, ni corto ni perezoso, llamó al primer teléfono que encontró, el de la sede central de Playmobil, a reclamar lo suyo. Conociéndolo, dentro de algunos días nos llegará una corona. O dos.

miércoles, 12 de mayo de 2010

Década prodigiosa

El lunes de esta semana, mi señora madre cumplió una de esas cifras redondas que se celebran por todo lo alto. Mis hermanas organizaron una fiesta de las de no olvidar. Se lo curraron un montón. Bien por ellas. Por supuesto fue una fiesta sorpresa y funcionó. Menuda cara puso cuando lo descubríó.

Entre la gente que se reunió, hacía años que muchos no se veían, y el momento presentación de fotos antiguas parecíamos los de "Amanece que no es poco" haciendo flashback.

A mí me encargaron dos cosas: unas palabras (escritas) para abrir el libro de recordatorios que le hicieron (rollo primera comunión) y la selección musical.

Como yo soy muy del cuento de la lechera, pensé que las masas me sacarían a hombros celebrando mi buen gusto al elegir las canciones y comenzaría así una meteórica carrera que me llevaría a ser declarado el DJ del año 2010 por la revista Rockdelux. Pero al final pasaron de mis CDs y pusieron una lista de Spotify que nadie escuchó porque estaban más interesados en contarse cosas después de tanto tiempo sin hacerlo. En todo caso, quien quiera escuchar algunas de las canciones que elegí puede hacerlo aquí.

Respecto a lo que escribí, creo interesante recuperar un par de cosas.

La primera es una idea que tomé de Georg-Christoph Lichtenberg (otro de los que sale en la antología de humor negro que me estoy leyendo). Su frase es esta: Pero el hombre, que vive en tres lugares, en el pasado, en el presente y en el futuro, puede ser desdichado cuando uno de los tres no vale nada. Me pareció una frase que daba mucho de sí. Por ejemplo, se puede decir que el peso del pasado y del futuro puede ir cambiando según se cumplan años pero lo importante es que el peso del presente sea siempre el óptimo. Lo mismo se puede decir usando metáforas geométricas. El pasado, el presente y el futuro deben, para que todo marche bien, sumar siempre 180º, como los ángulos de un triángulo.

La otra cosa que quiero decir sí la voy a transcribir en parte: El amor de madre es prodigioso. Porque es generoso e infinito sin que eso suponga esperar nada a cambio. Bueno, se espera pero si no se recibe no pasa nada, tal vez un pequeño desconsuelo. El único amor generoso e infinito. Ninguno más es así. Un amor sin balanzas en las que medirse, sin espejos en los que reflejarse, sin modelos de referencia, sin mucho ni poco. Un amor para toda la vida, hagan lo que hagan los hijos. A veces es fácil ser madre. Otras es difícil...

PD: Mis hijos y yo hicimos un duelo a muerte de corbatines. Debo decir que, a pesar de todos mis esfuerzos, perdí. La culpa la tuvo el cinturón blanco, que me lo dejé en casa. Como llevaba otro un poco feo, me tuve que poner los faldones del polo por fuera y de todos es sabido que a Darío y a Juan les quedan los faldones por fuera mucho mejor que a mí.

martes, 11 de mayo de 2010

Suciedad / Dinero

Suciedad. Diré que mi relación con la suciedad ha pasado de ser racional-científica a emotiva-pasional. Hace años, debía fijarme conscientemente en ella y una vez que notaba que la cosa había sobrepasado cierto umbral tolerable, me ponía a limpiar. Ahora, voy por la casa y siento un malestar difuso que no consigo explicar. Y, antes de darme cuenta, estoy limpiando compulsivamente. Como esta mañana, que todavía no eran las ocho cuando he apurado el café con leche de pie y me he puesto a fregar la cocina y la salita antes de que se despertaran las criaturas.

Dinero. Ayer hice un uso peculiar del dinero. Primero, una madre del cole que no tiene tiempo de ir al banco me dio dinero para que le pagara la cuota del AMPA. Ingresé un dinero que no era mío. Después, en Mercadona...

(Interludio. Anoche estuvimos de fiesta hasta bien tarde, lo contaré en el siguiente post. Darío se estaba echando una siesta mañanera para recuperar fuerzas y se acaba de despertar. Madre mía, le he dicho, pero si estás empapadico desudor. Sí, me ha respondido, es que estaba jugando mucho con la tita M.)

Sigo. Después, en Mercadona, la tarjeta no quiso funcionar. De vez en cuando me hace pasar por momentos de apuro. Por suerte, había una amiga que me dejó prestado. Pagué la compra con un dinero que no era mío.



PD: Cuando le decimos a los niños que no toquen el dinero porque está sucio, ¿nos referimos a una suciedad literal o a una sociedad simbólica? ¿La suciedad simbólica es revolucionaria o misántropa? Quiero decir ¿decimos que el dinero es sucio porque representa el sistema capitalista o porque está tocado por las manos de los seres humanos que son básicamente corruptos y dañinos?

PDII: Nuevo objeto encontrado en el blog de los cuentos pop.

PDIII: Escribe Pétrus Borel (yo tampoco sé quién es pero sale en una antología que tengo de humor negro que hizo André Breton): Creo que la única manera de hacerse rico es ser feroz, un hombre sensible jamás se enriquecerá. Para enriquecerse, hay que tener una sola idea, un pensamiento fijo, duro, inmutable, el deseo de acumular un gran montón de oro; y para llegar a aumentar ese montón de oro, ¡hay que ser usurero, estafador, inexorable, extorsionista y asesino!, ¡maltratar especialmente a los débiles y los pequeños!

domingo, 9 de mayo de 2010

Bestiario de elhombreamadecasa: La polilla


Elhombreamadecasa se levanta de la cama con un humor propio de orco. Como la experiencia es un grado, espera a que Mercedes salga de casa para salir él de la cama. Así se ahorra darle los buenos días con unos gruñidos.

El lunes pasado, después de salir de la ducha, encontró una lista de la compra encima de la mesa de la cocina. Mercedes suele hacerla el domingo por la noche. Según ella, es la forma de demostrar que se preocupa por las tareas domésticas. Según él, se trata de una injerencia inadmisible en sus labores de ama de casa. Sea como fuere, una de las cosas anotadas era la siguiente: "Antipolillas para los armarios de la cocina". Elhombreamadecasa, que no sabe tanto como cree, pensó que había leído mal y se guardó la lista en el bolsillo del pantalón para no olvidarla.

Ya en el Mercadona, sacó la lista y comprobó que no era un error. Ponía "Antipolillas para los armarios de la cocina", sin duda. Y lo más sorprendente: había. Bosque verde, of course. La cosa consiste en una pegatina impregnada de ferohormonas que atraen a las polillas hacia su muerte por atrapamiento. Quedan pegadas y allí mueren lentamente (ver foto).

Y ahora viene lo llamativo del asunto. Cada vez que elhombreamadecasa abre el armario siente una tentación irreprimible de tocar la pegatina.

Opciones:

a) En una vida anterior, fue polilla.
c) En su ADN, por algún tipo de mutación inesperada, hay algún cromosoma polillil.


PD: El domingo por la mañana, elhombreamadecasa vio a Mercedes anotar cosas en la libretita que Juan le regaló por el día de la madre. ¿Qué haces? preguntó. Apunto las cosas que quiero, respondió ella. Un escalofrío recorrió la espina dorsal de nuestro héroe porque esperó encontrarse una lista con cosas del tipo:

- Que te levantes de buen humor.
- Que seas tan cariñoso como al principio.
- Que te hagas rico escribiendo de una vez por todas como me prometiste que harías cuando éramos novios.
- Que arregles de una vez el armario del patio

Por suerte, era solo otra inocente lista de la compra.

sábado, 8 de mayo de 2010

Misterio (mitad africano mitad transilvánico)

Hace un par de días me encontré con lo siguiente en la puerta del patio:


Todavía no sé si es que mis hijos se han pasado al arte de los hermanos Chapman o si se trata de una advertencia sobre lo que les espera a los juguetes incautos que se atrevan a adentrarse en los dominios salvajes de Juan y Darío.

jueves, 6 de mayo de 2010

Las increíbles aventuras de Niño catódico y Niño sónico. Hoy: ¡COMIENZA LA ACCIÓN! (Presentando a Peluche diabólico)

Al final lo del gimnasio no pudo ser. Costaba mucho alquilarlo. Tal vez si Niño catódico y Niño sónico hubieran decididos emplear sus poderes para el mal, podrían haber asaltado un banco y conseguir dinero más que suficiente. El bien no sale muy rentable. Fede se lamentaba de que en su reducido grupo de superhéroes no haya ningún heredero rico o industrial de fortuna, algo muy habitual en los cómics, pero esto es el mundo real más parecido a las penurias diarias de Peter Parker que a otra cosa.

Entrenar en el Campus de Espinardo se había puesto complicado porque con las obras del tranvía había obreros a todos hotas yendo y viniendo de un lado para otro. Una tarde, Fede se llevó a Niño sónico y Niño catódico a dar un paseo en busca de algún lugar solitario en el que poder practicar sus poderes.

Pasaron el instituto de Espinardo y se dirigieron hacia el borde de la autovía. Al lado de una fábrica abandonada encontraron un peluche abandonado.

-Mira, papá, un osos gigante -dijo Niño catódico.

-¿Nos lo podemos quedar? -preguntó Niño sónico.

-No toquéis eso -dijo Fede ejerciendo de padre escrupuloso y corta rollos-. Está sucio y asqueroso. Sigamos paseando.

-Jo, papá, está ahí abandonado. Da pena.

-Jooooo, papá -repitió Niño sónico apoyando a su hermano.

-No seáis pesados. Eso no es un peluche, es basura. Venga, vamos.

Pero según se daban la vuelta para continuar el paseo de inspección, un ruido extraño sonó a sus espaldas. Los tres se volvieron sobresaltados para ver cómo el peluche se incorporaba poco a poco. Niño sónico y Niño catódico celebraron el prodigio con gritos pero Fede notó cómo un escalofrío de terror le recorría el espinazo. Acababa de llamar basura a un peluche gigante que cobraba vida y eso no hacía presagiar nada bueno. Además, los ojos inyectados en sangre del muñeco daban muy mal rollo.

Con un gruñido aterrador, el peluche se abalanzó sobre Fede, que apenas tuvo tiempo de esquivar el primer zarpazo.

-¡Viva! -gritó Niño catódico-, ¡el oso está vivo!.

-¡Quiere jugar! -dijo Niño sónico.

-¡No quiere jugar! -gritó Fede-. ¡Quiere matarme! ¡Juan, usa tus poderes! ¡Tenemos que derrotarle!

-Me tienes que llamar por mi nombre en clave -dijo Juan.

-Está bien, está bien. ¡Niño catódico, usa tus poderes! -gritó Fede mientras corría en círculo huyendo del peluche.

Niño catódico se concentró e hizo aparecer un borreguito pequeño, blando y tierno.

-¿Pero qué coño es eso, Niño catódico? Así no lo vamos a derrotar.

-No se dice coño, papá.

-Cuando estás a punto de ser devorado por un peluche andrajoso sí. Por lo que más quieras, Niño catódico, trae otra cosa de la tele.

-Pero si he hecho lo que me dijiste. He pensado en ti y he traído algo de la tele en lo que estabas pensando.

Entonces Fede reconoció al borreguito de Norit y maldijo su preocupación por las prendas delicadas. Si salía de esa, prometió no volver a lavar a mano ningún jersey.

-Olvídame a mí. Entra en la cabeza de Niño sónico y saca algo de allí -dijo mientras la pestilente zarpa del oso malvado le rasgaba la camisa.

Niño catódico se concentró por segunda vez con un resultado esperado.

-¡Es Pippi! -gritó Niño sónico.

Fede se felicitó por haber acertado. No hay nada como conocer a los miembros de tu equipo, pensó aplastado por la pierna de Peluche diabólico.

-Niño catódico, por lo que más quieras, dile a Pippi que me salve del oso.

-No hace falta que me lo diga él, te he oído. Los mayores son tan raros -dijo Pippi.

Entonces Pippi se acercó al oso y lo aturdió con un golpe de izquierdas.



Una vez atontado, lo remató con un tremendo derechazo que lo lanzó por los aires.



El peluche salió volando hasta perderse de vista.

-Bueno -jadeó Fede- parece que nos hemos encargado de nuestro primer supervillano. -Y después añadió como si no hubiera leído un tebeo en su vida: Estoy seguro de que no lo volveremos a ver.


Próxima entrega: Peluche diabólico, Orígenes

miércoles, 5 de mayo de 2010

Brand new... car



Siempre decimos que ahorramos más que nada por si se nos rompe el coche o alguna muela. Los dos imprevistos más caros que hemos conocido hasta ahora. Pues bien, se nos rompió el coche viejo. Al menos fue una de esas roturas tan caras de reparar que queda claro que más vale darlo de baja y hacerse con uno nuevo.

Barajamos varias posibilidades. La que más nos gustaba era la de la moto. Ya nos veíamos con nuestra Vespa o Lambretta llenica de espejos y dianas mods. Pero no tenemos garaje y una moto no dura ni una noche en la puerta de nuestra casa. Espinardo es lo que tiene.



También pensamos en una bici. Pero Mercedes vuelve a casa a las tres y yo me voy a las tres y media. A esas horas y en estas latitudes, no bajaremos de los cuarenta grados dentro de poco. Y a nosotros, al contrario que le pasaba a Indurain, el calor nos sienta fatal para pedalear.

Así que nos hemos comprado un coche nuevo, gracias a las gestiones de mi suegro y su amigo el mecánico. Nuevo para nosotros porque será de segunda o tercera mano. Tampoco es un cadillac, como la canción de The Clash:





Y puestos a comprar, me he tenido que comprar un tocadiscos nuevo. Le había pedido prestado el suyo a mi madre y tocaba devolverlo. Debo decir que me quedé asombrado de lo bien que me informaron los vendedores de Mediamarkt y de la Fnac. Habitualmente no hay quien los saque de "Si no hay ahí es que no tenemos" pero estos hombres sabían de lo que hablaban.



¿A que le queda fenomenal el disco verde de las Undershakers que me compré en el mercadillo del SOS?

martes, 4 de mayo de 2010

En el SOS


No sé por qué pero me da una pereza terrible escribir este post. Desde hace años, tengo una máxima: si algo se complica mucho, no lo hagas. No es gandulería, es sentido común y se basa en años de acumular conocimiento empírico. A pesar de eso, voy a contravenir mi propia regla y escribir este post. No sé, quizás es que voy a escribir algo inconveniente o simplemente voy a soltar un rollazo que no le interesa a nadie.

El SOS 4.8 se llama así porque es un festival que promueve la sostenibilidad y dura 48 horas (ininterrumpidas). El punto entre el 4 y el 8 es una concesión al mundo digital que está bien. Y lo de la sostenibilidad... bueno, el festival se sostiene sobre una cantidad de luz y sonido que consumirá mucha energía y mogollón de vasos de plástico. A mí me parece bien que hayan festivales y no quiero ir de ecologista recalcitrante pero no mola que se mezclen churras con merinas. ¿Quieres hacer un festival sostenible? Chachi. Entonces que los conciertos sean cuando haya luz natural y que sean unplugged. Y sirve las bebidas en vasos de cristal que luego limpiarás con lavavajillas clase A++. Poner mensajitos enrollados en las pantallas gigantes y repartir folletos impresos en papel reciclado no es suficiente.

Hubo otra cosa rara en el SOS. Había voluntarios. Sí, voluntarios. Mientras unos pocos hacían su agosto, otros trabajaban gratis y sin que nadie les obligara. Ver para creer.

Dicho todo lo anterior, debo añadir que nos lo pasamos fenomenal y que el SOS está chulo. Una vez más, mil gracias a mi madre y mis hermanas, que lo hicieron posible.

El viernes llegamos a tiempo para el concierto de los Sunday Drivers. La primera canción que Juan tarareó y que pidió que pusiéramos una y otra vez fue "On my mind" (el vídeo lleva publicidad, qué se le va a hacer):



Si esto fuera Barrio Sésamo diría que ahora vamos a hablar de lejos y cerca. Esto es ver un concierto de lejos:



Y esto es ver un concierto de cerca:


Ver un concierto de lejos es como no verlo. Sabes que hay alguien tocando pero igual es que han puesto un disco grabado en directo. Así vimos, o no, a Franz Ferdinand y Los Planetas.

Ver un concierto de cerca es mucho mejor, dónde va a parar. Además, en las primeras filas la gente no está entrando y saliendo (una manía que nunca entenderé) ni está parloteando a gritos con el vecino.

Hubo un par de momentos bizarros. Joe crepúsculo versionando "Al alba" con su tecno descacharrado y los de un puesto de nachos asegurando que eran de las Alpujarras con un acento de Texas que ni Aznar en sus buenos tiempos.

En los puestos, había uno de discos. Ante estos casos, me comporto con lo que yo llamo una actitud de superhéroe: sé que es una trampa pero voy. Fui el viernes y volví el sábado con más dinero todavía. Así que estamos a cuatro de mayo y ya casi no me queda dinero para el resto del mes.

El sábado nos gustó más que el viernes. Intercalamos conciertos con lecturas de poesía y disfrutamos como locos de Lidia Damunt (su guitarra acabó pidiendo clememcia) y We are standard (con esas dos baterías, imposible no ponerse a bailar de forma enloquecida).

El descubrimiento del festival fueron The Magic Numbers. No los conocíamos y nos dejaron encantados. Dice Ángel Carmona que son el grupo de pop más abrazable del panorama internacional. Además me reafirman en mi convicción de que la paridad es buena:




Y ahora un momento frívolo que advierto desde ya que puede herir algunas sensibilidades. El viernes Mercedes y yo fuimos declarados la pareja más elegante del festival. Cierto es que todos los que nos lo decían y los que nos pedían echarnos fotos (no exagero) estaban borrachos pero igual de cierto es que son los niños y los borrachos los que dicen la verdad. Mi corbatín a juego con la camisa hizo estragos. Por no hablar del vestidito de dos piezas de Mercedes. Para estas cosas es clave elegir una marca de confianza. Fred Perry, por ejemplo, está desaconsejada en este tipo de eventos. Te gastas ochenta euracos en un polo con un laurel a la altura del pezón izquierdo para descubrir abochornado que lo lleva todo quisque. Algo parecido ha pasado con las zapatillas New Balance. Hace cosa de un par de años eran casi imposible de conseguir. Si llevabas unas, eras el rey, todos te miraban. Ahora están en todos los pies festivaleros. Ah, cómo desengrasa todo esto.

Acabo con una pregunta que formuló Mercedes y que lleva varios días en el aire: ¿Qué pasará cuando coincidamos con nuestros hijos en los conciertos?

PD: Se me olvidaba una cosa. Pasé algún que otro rato malo pero controlé mi pánico a las multitudes.

lunes, 3 de mayo de 2010

Lavaos las uñas de los pies

El método de inventar cuentos de Gianni Rodari sigue dando mucho juego. Esta noche, mientras cenábamos, les he contado un cuento a los chiquillos. Iba de una mamá que confundía las partes del cuerpo y cuando quería decir boca decía oreja y cuando quería decir mano decía rodilla. Así, un día, después de cenar les dice a los niños que se laven las uñas de los pies, cuando lo que quería decir era que se lavaran los dientes. Los niños, muy obedientes, van al cuarto de baño, se descalzan y se lavan las uñas de los pies con el cepillo de dientes y la pasta. Cuando ella llega y los ve de esa guisa se enfada un montón y amenaza con castigarlos pero ellos le responden que no les puede castigar porque solo están cumpliendo sus órdenes.

El cuento seguía con alguna que otra derivación escatológica, celebradas con gritos y risas por parte del auditorio infantil. Lo he interrumpido de golpe cuando me he dado cuenta de que se me hacía la hora de irme a la reunión del AMPA y he salido pitando. Lo último que he escuchado al salir era a Mercedes diciéndole a los niños que se lavaran los dientes.

Cuando he vuelto, Mercedes estaba bastante cabreada. Tanto conmigo como con Rodari.

Lunes

Hay un plan que hago cada dos por tres y que nunca me sale. Consiste en levantarme temprano y sacar media hora para sentarme con tranquilidad delante del ordenador, disfrutando del silencio y frío de la mañana y tomar café mientras leo la prensa o los blogs de las amigas (cosa que hago menos de lo que me gustaría). Sacaría media hora para poder pensar con tranquilidad en mis cosas y ver el día con perspectiva. Pero luego suena el despertador de Mercedes, que madruga un montón, y me digo quién quiere perspectiva teniendo una almohada. Así que mi plan se queda siempre sin hacer.

Ahora no es especialmente temprano, son algo más de las ocho, y mientras Darío da buena cuenta del biberón, me he puesto aquí a escribir algo.

Estoy viendo la semana en perspectiva desde el taburete del lunes por la mañana y me convence lo justo. El coche roto, el tocadiscos devuelto a mi madre, la cisterna estropeada del baño, mi trabajo a medio hacer, la compra, la comida... Lo digo siempre: sufro de vértigo.

En fin que ya he escrito unas pocas tonterías por si alguien entraba el lunes temprano en busca de novedades. En cuanto me sea posible me pongo a contaros con pelos y señales nuestras aventuras en el SOS. Menuda brasa os voy a dar. Preparaos.

PDI: Acabo de escuchar en la radio que el dueño de Mercadona es la segunda fortuna del país. Dentro de un rato iré a colaborar con la causa.

PDII: Anoche quise practicar el binomio fantástico de Gianni Rodari (de su libro "Gramática de la fantasía") para contarle un cuento a Caín y Abel. Cada uno tenía que decir un animal y yo me inventaría una historia con un animal que fuera la fusión de los dos. Pero no hubo forma de que Darío dijera otra cosa que "caca". Así que el protagonista del cuento fue un caballito de mar - caca.